Despedido e indemnizado por no querer festejar su cumpleaños
Kevin Berling, un hombre que trabajaba en una empresa en Kentucky, Estados Unidos fue despedido en 2019, siendo indemnizado con 450 mil dólares.
Las razones del despido fueron que el trabajador sufrió un ataque de pánico que provocó una reacción agresiva porque en la compañía celebraron su cumpleaños en contra de su voluntad.
El empleado afirmó haber advertido a sus superiores en Gravity Diagnostics de que padecía ansiedad y que no quería festejar su cumpleaños porque le traía malos recuerdos con respecto al divorcio de sus padres.
Según los recuerdos del muchacho, el 7 de agosto de 2019, durante el almuerzo, sus colegas lo sorprendieron saludándolo por su cumpleaños y colgaron una pancarta para festejar. Luego de este hecho, fue a su auto donde tuvo un ataque de pánico
El día que siguió se reunió con su jefa y un colega para hablar de lo sucedido y el hombre los agredió “apretando los puños y dientes, con su rostro enrojecido y temblando pidiéndole a la mujer que se callara”, sostuvo John Maley, abogado de Gravity Diagnostics. Este hecho hizo que su jefa y su colega temieran por su seguridad y culminó con el despido de Berling.
Hasta el momento, el hombre nunca había sido sancionado ni amonestado por su comportamiento.
Berling decidió demandar a Gravity Diagnostics por «discriminación por motivos de discapacidad» y en marzo la justicia resolvió que fuera indemnizado con 150 mil dólares por la pérdida de ingresos y otros 300 mil dólares por la humillación, la pérdida de autoestima y el sufrimiento causado.
Según el abogado de la empresa, quien manetiene que no hubo discriminación, nunca fueron informados de que el empleado padecía problemas de ansiedad y apelarán la decisión judicial.
«Los empleadores, particularmente en este momento de violencia en los lugares de trabajo, tienen el derecho y deben tomar medidas inmediatas, como aquí, para proteger a sus empleados», justificó John Maley.
Por su parte, la directora de Gravity Diagnostics, Julie Brazil, respaldó la decisión de despedir a Berling por haber tenido una conducta violenta en el lugar de trabajo. “Mis empleados fueron las víctimas en este caso, no el demandante”, agregó.
El abogado del ex empleado, Tony Bucher, aseguró que “no había absolutamente ninguna evidencia” de que su cliente representara una amenaza para alguien en Gravity, y menos que justificara su salida. “Tuvo un ataque de pánico. Eso es todo”, remarcó.“Como los representantes de la empresa no entendieron su respuesta, asumieron que era una amenaza. Asumir que las personas con problemas de salud mental son peligrosas sin ninguna evidencia de comportamiento violento es total y completamente discriminatorio”, concluyó.