La Federación Industrial de Santa Fe (Fisfe) reveló que la industria santafesina marcó en abril una suba interanual del 8,8% y registró el nivel más alto de los últimos 53 meses. El incremento se dio principalmente en la parte automotriz y siderúrgica, cuyos índices aumentaron por encima del 120%.
Según reflejó un informe mensual, la actividad con mayor incremento fue la automotriz, que en abril creció un 171,4% y acumula una suba interanual de 154,2% en el último cuatrimestre. Este crecimiento, sostenido en el aumento de las exportaciones, ofreció una perspectiva alentadora, considerando que General Motors realizó en su Complejo Automotor de Alvear una inversión de 300 millones de dólares para la fabricación de un nuevo modelo de vehículo de alta tecnología que comenzará en julio. Con esto, la planta automotriz de la provincia incrementó su capacidad de producción de 80 mil a 115 mil vehículos por año.
La otra rama industrial que presentó un importante aumento en su nivel de actividad fue la siderurgia, con una recuperación del 129,5% interanual, el cual le permitió revertir sus cifras adversas del primer bimestre de 2022. Entre sus rubros, se destaca el aumento del 62% en la elaboración de productos laminados.
Por otra parte, la producción metalúrgica marcó en abril del 2022 un incremento interanual del 17,1%, alcanzando un 12,2% acumulado en el último cuatrimestre. El nivel de actividad de dicho mes fue el más elevado de los últimos 53 meses, continuando la senda de crecimiento sostenido que esta industria presenta desde agosto del 2020. Vale destacar además que el registro de abril de este año es el más alto de la serie histórica para ese mes, ubicándose un 54% por encima al de 2019 y un 14% superior al de 2018. Entre sus actividades principales, se destaca el incremento en la producción de maquinaria agropecuaria (+33,5% interanual).
Otro rubro de importancia estratégica para el entramado productivo santafesino es la producción de biodiesel. En este sentido, vale ponderar el incremento interanual de 233% que tuvieron sus exportaciones. Además, respecto de colocaciones externas, es de destacar que las manufacturas de origen industrial santafesinas crecieron un 75% en valor y un 22% en volumen, destacándose los productos químicos (+106% en valor) y las maquinarias (+15% en valor).
También creció el valor de las exportaciones de lácteos un 26%, carnes un 15% y productos de molinería un 12%. Además, las industrias química, automotriz, láctea, frigorífica, de bienes de capital y de la curtiembre, entre otras, tienen un panorama de recuperación respecto de su desarrollo externo. Respecto de este crecimiento, el ministro de Producción, Ciencia y Tecnología de Santa Fe, Daniel Costamagna, aseguró que “las cifras publicadas por Fisfe dan cuenta de lo que vemos día a día recorriendo la provincia. Santa Fe es el motor productivo del país y su crecimiento es evidente. Desde el gobierno provincial trabajamos codo a codo con el sector privado para poner todos los instrumentos públicos a disposición de los productores, las industrias y los comercios, porque estamos convencidos de que una parte importante de la solución a los problemas del país se encuentra en el desarrollo productivo del territorio y en la generación de trabajo digno”, dijo. En ese sentido, el ministro destacó el funcionamiento de la línea de créditos Santa Fe de Pie que el gobierno de la provincia ejecuta a través del Banco Nación y el Nuevo Banco de Santa Fe.
Con la entidad bancaria nacional, la Provincia acordó hace un año la creación de un fondo de 26,5 mil millones de pesos para financiar al entramado productivo santafesino. De ese total, ya se recibieron solicitudes por 21,6 mil millones y se emitieron certificados de aprobación por 20,7 mil millones. “Los números que muestra la industria santafesina no son casualidad. En esta provincia hay un Estado que se esfuerza por el crecimiento de sus empresas. Por eso, el gobernador Omar Perotti firmó con el Banco Nación este acuerdo histórico para Santa Fe, generando la mayor herramienta de financiamiento que el sector productivo haya tenido. Y la pertinencia de este instrumento está clara: en menos de un año ya se agotó más del 80% del cupo”, finalizó Daniel.
