El disparo del dólar
Entre medio de la crisis que transita el mercado argentino y dando un salto de 6 pesos, el Dólar Blue este lunes llegó a $216 para la venta, sumando más presión a los precios.
El dólar que se vende en el mercado paralelo todavía está lejos del pico máximo de $223 registrado a fines de enero último, pero comienza a mostrar señales de alerta en un mercado que amplía la brecha cambiaria, mostrando ahora una diferencia de casi 77% respecto al mayorista.
En el mercado minorista, de acuerdo con los valores informados por el Central en base a un promedio de lo exhibido en los bancos, el billete concluyó el día en $121,028 comprador y $127,603 vendedor. Si a ese valor se le agrega la carga impositiva del 30% del impuesto País, más el 35% a cuenta de Ganancias, cada ahorrista debe desembolsar $210,55 por cada dólar.
En el mercado mayorista, la divisa norteamericana subió a $122,30, 51 centavos arriba del cierre del viernes, anotando la corrección más alta para un inicio de semana desde el 18 de abril pasado. Según estimaron fuentes privadas del mercado, el Banco Central (BCRA) terminó la jornada con compras netas por US$ 25 millones en su intervención diaria, el registro más alto desde el inicio de junio. Con esto, la brecha cambiaria respecto del dólar mayorista se posiciona en 76,6% y profundiza las distorsiones sobre el resto de los precios de la economía.
Por su parte, las cotizaciones financieras acusaron recibo y operaron al alza, junto con la volatilidad del dólar paralelo. El dólar Bolsa o MEP, subió +3,7% y cotizó en récord de $229,10, con lo que la brecha con el oficial mayorista se ubicó en el 87,3%. El dólar «contado con liqui» (CCL) ganó +4,5% a $237,74, una diferencia de 94,4% frente al oficial mayorista.
Según los expertos, son cuatro las variables que metieron presión en los últimos días a los distintos tipos de cambio que existen en el mercado:
1) Una pausa al “carry trade”. Con el desarme de posiciones desde las inversiones en pesos atadas a la deuda CER, que ponen presión a las cotizaciones financieras.
2) La expectativa de un dólar más fuerte en el mundo. Producto de la suba de tasas en Estados Unidos.
3) El flojo desempeño del Banco Central. En la compra de divisas para fortalecer las reservas durante los primeros meses del año.
4) La inflación local que no cede. Aún con el precio de las materias primas récords, el Banco Central (BCRA) tuvo muchos problemas para acumular reservas en los últimos meses. Mostrando una menor capacidad de compra que la del 2021 (con un total de US$ 930 millones en lo que va del año, contra US$6.456 millones del 2021).
La performance de los títulos soberanos de las últimas jornadas estuvo atada a la de los bonos ajustados por inflación (CER) en una de las semanas más tensas desde la reestructuración del 2020. El segmento CER, la principal herramienta del Gobierno para colocar deuda y financiar al Tesoro, padeció alta volatilidad durante las últimas semanas. Cuando parecía que las bajas de los bonos CER no encontraban piso una vez más, el BCRA y otros organismos públicos tuvieron que intervenir en el mercado secundario para sostener las paridades de los títulos del Tesoro. De esta manera, a los bonos locales se les hace cuesta arriba revertir la tendencia en rojos de junio, donde ya acumulan pérdidas de entre -7% y -10%. Esto hizo disparar el índice de Riesgo País de la Argentina que superó los 2.100 puntos básicos por primera vez desde que se reestructuró la deuda con los acreedores privados en septiembre de 2020.
El economista especializado en finanzas, Christian Buteler, explicó cómo incide en la economía doméstica la tensión en los mercados y lo que puede pasar con el tipo de cambio.
“El salto del dólar lo primero en que hace es ponernos a todos nerviosos, tal vez, el que no estaba para nada pensando en dólares comienza a analizar, si compra o no y eso genera una propia demanda que se activa por expectativas”, señaló Buteler.
“Cuando el billete no es noticia y está tranquilo, nadie sale a comprar dólares”.
El problema se da cuándo la incertidumbre en materia de precios comienza a avanzar y se le suma un efecto cobertura. Según el analista financiero, la semana pasada se vivió momentos de tensión en el mercado de deuda, “hubo una fuerte venta de bonos por parte de los inversores, que se liquidaron entre el pasado viernes y el lunes; y parte de esos pesos se están yendo al dólar”.
“Esto impactó en las cotizaciones que estamos viendo”. Con respecto al salto de las cotizaciones y el impacto en la inflación, Buteler advirtió que, el billete venía muy tranquilo en los primeros meses del año, corriendo muy por debajo de los precios.
Para el analista financiero, en principio no debería tener un impacto directo, ya que los precios van a dejar de subir cuándo el Gobierno modere la emisión monetaria.
“Los precios suben por un exceso de emisión de pesos que se utilizan para financiar un exceso de gasto, ese es principal problema que provoca inflación ”, advirtió. Para recomponer la confianza, la Argentina necesita de muchas medidas y dar respuesta a la inflación, una de las cuales es encuadrar su nivel de gastos, equilibrando las cuentas para moderar la emisión tanto de deuda cómo de pesos. “Eso quitará presión a todos los precios de la economía, incluyendo al tipo de cambio”, finalizó.