Séptima jornada de competencia: día soleado en las playas pero nuboso en las salas
El de este miércoles, séptima jornada de Competencia por la Palma de Oro en Cannes no fue un día decepcionante, pero tampoco tan luminoso como el que se vivió fuera de las salas cinematográficas, donde las lluvias quedaron atrás, el cielo se despejó, subió la temperatura y arrojados bañistas se animaron a nadar en el Mediterráneo.
En primer turno de competencia se vio el drama romántico de época francés "La pasión de Dodin Boufant", filme del realizador vietnamita Hung Tran Ang que tuvo amplia repercusión en 1993 con "El aroma de la papaya verde", que ganó la Cámara de Oro acá como la mejor ópera prima del festival y fue un éxito mundial, con nominación al Oscar incluida.
En este caso, Tran Ang parte del libro "The Life and Passion of Dodin Bouffant, Gourmet", de Marcel Rouff, sobre un exquisito y revolucionario chef francés de mediados del Siglo XIX, interpretado por Benoit Magimel ( en 2022 en Cannes con "Pacifiction" de Albert Serra, papel por el que ganó varios premios, entre ellos el César francés) y por Juliete Binoche como su ayudante de la que se enamora ("Blue", "Copia certificada", entre otras).
El filme es un regodeo culinario y esa es su gran virtud, la inmensa cocina a leña del Siglo XIX y los manjares que cocinan e inventan los dos chefs, asistidos por dos jovencitas.
Dodin ama a Eugenie (Binoche) pero ella se rehúsa a casarse por el temor a perder la relación artística y culinaria que los une y más cuando se encuentran ya "en el otoño" de sus vidas, aunque el chef hará una última jugada.
Trailer "Il sol dell avvenire"
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Se trata de un filme agradable y "muy sabroso" pero lejos de alguna posible genialidad como la de los cocineros.
En segundo término se presentó "Il Sol Dell'Avvenire", la vuelta de Nanni Moretti a la Croisette, donde estrenó más de 10 películas con la Palma de Oro en 2001 para "La habitación del hijo" y el premio a Mejor Dirección en 1994 con "Caro Diario".
Aquí Moretti, en dupla con Margherita Buy analizan con sorna optimista ciertas relaciones y cuestiones del presente a partir de la filmación de una película que recuerda la llegada de un circo húngaro invitado por el Partido Comunista Italiano a Roma en momentos del levantamiento de Budapest contra el régimen de Stalin.
"El PCI era un partido que tenía dos millones de afiliados" dice furioso en una reunión de producción del filme Moretti (que hace de director) a un joven para quien la única posibilidad de haber sido comunista fue haber nacido en Unión Soviética.
Sobre estas marcas de un presente que desilusiona, Moretti intenta abrir una esperanza o, al menos, conseguir la condición como para poder vivir la actualidad sin atormentarse por sus embates.
En el medio, su mujer (Buy) trabaja por primera vez como productora de una película que no es de él, violenta y que detesta, además ella va al psicoanalista para separarse; y la hija de ambos, joven y bonita se quiere casar con un septuagenario.
El presente no parece estar entregándole las mejores señales pero él resiste o prefiere una condición que le permita surfear el descalabro en que cayeron las ilusiones del pasado, quizás Moretti esté hablando, a su modo y en tono de comedia, de las nuevas derechas, pero el tema no lo menciona.
La idea es que todo este desconcierto pasará y las cosas se acomodarán solas en una nueva situación, por eso no renuncia al baile ni a los guiños y prefiere, para el filme que está realizando en la película, un final alegre sobre uno trágico; se niega a la derrota mientras aguarda el próximo round.
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