Cantero: «Tendremos que acostumbrarnos a estar en la escuela hasta entrado diciembre»
La ministra de Educación de Santa Fe justificó las clases hasta el 23 de diciembre y aseguró que será una constante durante los próximos años en todo el país. Además, fundamentó las nuevas formas de evaluación y promoción en el secundario: "es más calidad, más enseñanza y más recursos en el acompañamiento de las trayectorias".
Luego de una semana de entredichos, la ministra de Educación de la provincia insistió en que las clases deben terminar el 23 de diciembre en las escuelas santafesinas y pidió «desdramatizar» la discusión pública sobre la extensión del ciclo lectivo. «Será una constante durante los próximos años», aseguró Adriana Cantero.
Sobre el cierre de la semana pasada, la cartera educativa oficializó las fechas y modalidades de cierre del ciclo lectivo. La decisión generó rechazo por parte de los gremios docentes, quienes aseguran que no son ellos los que definen cuando terminan las clases, sino cada escuela.
«Nunca he visto tanta discusión pública en torno a las circulares que emite el ministerio. O antes no había circulares o no había este nivel de discusión pública. Celebro que la haya, todas las voces son necesarias para comprender mejor los desafíos educativos del mundo complejo en el que nos movemos. Pero también creo que tenemos que poner las discusiones en contexto y que no sea una opinología que solo sirva para confundir. Entre todos debemos tejer la trama para que la Educación sea la mayor política distributiva que el Estado tenga para mejorar las condiciones de nuestras generaciones más jóvenes», planteó.
-Los gremios docentes manifiestan que, más allá de lo acordado en paritaria, son las propias escuelas quienes organizan el cierre de ciclo. Para llevar tranquilidad, ¿cuándo terminarán las clases en las escuelas santafesinas? ¿dependerá de cada escuela que se cumpla con la extensión propuesta desde el ministerio?
-Las escuelas están en funcionamiento hasta el día 30 de diciembre. Lo único que se extendió es el tiempo en que los docentes estarán en contacto con los chicos. Las clases serán hasta el 23, así se desprende del acuerdo paritario; consta en el acta, fue discutido, votado y firmado con los representantes gremiales. Lo que pretende la circular es orientar las actividades de cierre de año que se desarrollarán entre diciembre y febrero.
Pero me parece importante remarcar es que tenemos que desdramatizar la extensión de días de clase. Tendremos que ir acostumbrándonos a tener ciclos lectivos largos. Desde que la Argentina firmó la ley de los 180 días venimos procurando extender los ciclos lectivos, porque somos el país de la región que tiene en promedio menos días de clase. El año pasado, incluso, firmamos un acuerdo federal de ampliar a 190 los días de clases. Entonces, es sencillo pensar que si arrancamos el primero de marzo, el ciclo se va a extender. Y eso va a ser así de aquí en más. Así que tendremos que habituarnos a estar muchas veces hasta entrado diciembre en la escuela.
-Buena parte de los colegios ya tenían delineado el calendario con fechas para evaluaciones, recuperaciones, actos de fin de año y demás actividades. ¿Deberán readecuarlo? ¿Puede haber sanciones en caso que no cumplan?
-No pensamos en sanciones. Confío en que todos vamos a cumplir con los acuerdos que hemos construido. De parte del ministerio y también de las escuelas con sus directivos y los gremios docentes. Estoy segura de que vamos a hacerle honor al compromiso de hacer lo mejor por nuestros jóvenes.
-¿Qué pasa con el estudiante que ya aprobó todo? ¿No resulta injusto que tenga que seguir yendo a clases?
-El ciclo lectivo es universal, para todos. El que ha avanzado más tendrá la oportunidad de complejizar y profundizar lo que aprendió. Y los que tienen mayores dificultades tendrán momentos de estar en relación con sus docentes para poder cerrar los aprendizajes priorizados.
Debemos trabajar en aulas heterogéneas. Hay mucho de la didáctica que nos enseña cómo enseñar en espacios colaborativos, con distintos niveles en las actividades, que ayuden a favorecer los aprendizajes. Un ejemplo de ello son los talleres, un formato curricular, que se aplica en la formación de los docentes, para poder construir significatividad de los aprendizajes. Por eso, entendemos que se trata de una mejora.
-Otro planteo es que con una circular no alcanza para reglamentar estos cambios…
-Es que no hay ningún cambio. Lo mismo que se hizo el año pasado es lo que estamos haciendo ahora. La única innovación es que pongamos el conocimiento en relación y tengamos evaluaciones más abarcadoras de los procesos educativos, pero esto es algo que ya se viene haciendo.
La circular da sugerencias de cómo tenemos que cerrar un ciclo lectivo que podríamos llamar trienio, porque empalma con el bienio de pandemia, donde hubo distintas instancias de distanciamiento y este año recién pudimos articular con la totalidad de la presencialidad. Esto repercute en que, por ejemplo, muchos chicos de la secundaria, como los de tercer año, recién ahora están aprendiendo a ser estudiantes en su escuela.
-Con respecto a las innovaciones en los criterios de evaluación y promoción, ¿no deberían hacerse readecuaciones administrativas?
-No, porque tampoco estamos modificando ninguna normativa. El decreto 181 de 2009 que es el que regula el régimen académico y las evaluaciones del secundario, tiene un artículo que es el número 7, donde expresa que todas las situaciones no previstas e inéditas podrán ser resueltas por el Ministerio de Educación. En base a ese artículo es que el año pasado instrumentamos estos cambios y ahora hacemos una reedición de las mismas indicaciones que, por otra parte, se encuentran enmarcadas también en todos los acuerdos federales de los últimos años.
La verdad que sorprende un poco que se desconozca el marco normativo. Este es un camino en el que ya venimos trabajando desde hace tiempo, repensando las evaluaciones y las acreditaciones con más tiempo de clases.